miércoles 03/10/2007 - El mundo.es
MADRID.- Las pesquisas policiales sobre la aparición de 70 pastillas de uranio enriquecido fuera del perímetro de seguridad de la fábrica de combustible nuclear de Juzbado, en Salamanca, se centran en un guarda de seguridad, según ha podido saber EL MUNDO de fuentes próximas a la investigación.
De esta manera, el número de trabajadores investigados se reduce considerablemente, y se centra exclusivamente en personal contratado por una empresa de seguridad que presta sus servicios en la fábrica nuclear. La hipótesis con la que trabajan los investigadores de la Guardia Civil es que este trabajador habría cometido el sabotaje por estar descontento con su empresa.
La posibilidad de pasar por fuera del arco de detección de radiactividad, o simplemente de desactivarlo, que puede tener un guarda de seguridad, podría también explicar porqué los detectores de radiactividad no alertaron de la salida irregular de 300 gramos de uranio enriquecido con U-235 al 4%.
Según las citadas fuentes, no se descarta el desenlace del suceso en las próximas horas o días. Se procederá a la detención del presunto culpable en el momento que se obtengan las pruebas suficientes para imputarle de un delito penal por manipulación de materiales peligrosos fuera de recintos cerrados y de seguridad.
De hecho, el presidente de la Empresa Nacional de Uranio (Enusa), propietaria de la factoría de Juzbado, José Luis González Martínez, señaló ayer que "en pocos días o semanas" se sabrá qué ocurrió con el material radiactivo aparecido. Un incidente que, añadió, "esperamos que no se vuelva a repetir"."El proceso de investigación es delicado y lento", pero en unos días "tendremos un estudio más detallado sobre lo ocurrido con las pastillas", insistió, a la agencia Efe, el directivo de la empresa pública que fabrica unas 300 toneladas de combustible para plantas nucleares civiles, de las que exporta un 60% a países europeos con centrales.
Señaló además que las pastillas proceden de un área concreta. "La realidad es que dentro de la fábrica hay distintas áreas de producción y lo que parece que sabemos es que las pastillas proceden de una determinada área. Esto limitaría el número de trabajadores investigados", señaló antes de comparecer ante la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados.
