El subdirector asistencial de Atención Primaria y 061 del Servicio de Salud de Baleares (Ib-salut), Joan Pou, ha asegurado hoy que el Ib-salut ha incrementado este año un 11,7 por ciento el presupuesto en materia de seguridad hasta alcanzar un gasto total de 3,2 millones de euros.
EFE Pou ha dado hoy una rueda de prensa, acompañado por la directora de Curas y Coordinación Sociosanitaria, Patricia Gómez; y el subdirector de Relaciones Laborales, Pedro Jiménez; para dar cuenta del nivel de implantación del Plan para prevenir la violencia en los centros de salud.
Días después de que profesionales del Hospital de Son Llàtzer sufrieran una agresión que ha dado lugar a concentraciones a varias concentraciones de protesta en distintos hospitales, Pou ha remarcado que las agresiones "son situaciones aisladas ya que la mayor parte de los ciudadanos tienen una actitud correcta con los profesionales de la salud".
Pou ha recordado que los profesionales del IB-Salut sufrieron en 2007 un total de 452 incidentes violentos, que comprendieron agresiones físicas y verbales a personal sanitario y desperfectos en las instalaciones de los centros médicos.
El subdirector asistencial de Atención Primaria ha anunciado que los PAC de Llucmajor, Alcúdia y Capdepera y los centros de salud de Inca y Son Serra de Marina contarán en breve con servicio de vigilante de seguridad.
Estos cinco centros se sumarán a los siete que ya cuentan con vigilantes en Palma y a los hospitales de las Baleares, que cuentan todos, debido al gran volumen de pacientes que atienden, con un sistema de seguridad específico.
Actualmente todas las gerencias del Ib-Salut disponen de un plan de prevención de la violencia y tienen constituida una comisión técnica formada por distintos profesionales, para tratar las diferentes medidas a aplicar.
El subdirector de Relaciones Laborales del Ib-Salut, Pedro Jiménez, ha explicado que el Plan para prevenir la violencia en los centros de salud actúa en tres frentes: la prevención, la sensibilización y el proyecto de seguridad, que evalúa cada uno de los centros de salud públicos a fin de mejorar las medidas de seguridad.
Jiménez ha destacado que en caso de accidente se ha establecido un protocolo de actuación y que todos los profesionales que padecen algún tipo de agresión violenta disponen de forma inmediata de apoyo psicológico y jurídico.
El subdirector de Relaciones Laborales ha afirmado que "desde la línea jurídica es importante defender que se reconozca al personal del Ib-salut como autoridad" para lograr que en los casos de agresión, los responsables reciban penas más severas.
En este sentido, Jiménez ha recordado que ya ha habido dos sentencias recientes por agresiones ocurridas en los centros de salud de Emili Darder y Sa Indioteria, en las que el agresor ha sido condenado por atentado contra la autoridad y no como un simple delito de faltas.
